El macramé es el arte del nudo ornamental, y los materiales para hacerlo no son caros y tampoco difíciles de conseguir.
Para practicar puede emplear cordones de cualquier material, así como cordones de cortina, mecate, piola además del cáñamo utilizado en las tiendas para envolver paquetes.
Los hilos deben ser lo suficientemente fuertes para resistir el roce que se origina al hacer los nudos y que no tengan mucha elasticidad.
También, necesitará tijeras, alfileres de cabeza redonda o en T y una tabla de aglomerado de madera, de corcho o de hule espuma, o un cartón muy grueso, de 60 cm por 1 m, donde pueda prender la labor.
Corte ocho cordones de 2 m de largo cada uno y un cabo de sostén de 15 cm. Haga un nudo en cada extremo del cabo de sostén y fije éste firmemente en la parte superior de la tabla de trabajo.
Con el siguiente cabo (cabo de amarre) haga una media vuelta sobre el portanudos; haga una segunda media vuelta para completar el nudo. Jale para apretarlo.
Continúe haciendo dobles medios nudos con los demás cabos y al finalizar prenda el cabo de amarre a la derecha y nuevamente comience de derecha a izquierda.
Para hacer una variación de la doble media vuelta, incline el portanudos en diagonal o practique los nudos verticalmente encima del portanudos.
Si va a hacer un nudo plano, el segundo nudo básico de macramé, use cuatro cabos; deje dos cabos en el centro y con los dos de los extremos comience por formar un medio nudo (A). Después haga otro medio nudo (B).
Muchos medios nudos alternados formarán una trenza de nudos planos, y varios medios nudos en la misma dirección (trenza girada).
Autor: Blog del como
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